Esas tus calles
Estas mis calles.
Algunas calles.
Calles para caminarlas
trasegarlas, seguirlas
encontrarlas, desviarse.
Calles para pararse
atravesarlas, aceptarlas
sufrirlas, soportarlas
disfrutarlas, recorrerlas.
Las calles de día
llenas de autos
de pitos, de ruido, de ventas,
de gentes que caminan sin ver, ensimismadas.
Las calles con lluvia
cantarinas, evocadoras
con barquitos
y marinos de ilusión en los charcos;
con huecos, con fango, resbalosas.
Las calles de noche
silenciosas, tranquilas, serenas.
Otras polvorientas
con basura, con papeles
y trozos irreconocibles.
Algunas calles de noche
incitantes, provocadoras,
pecaminosas
que llevan a peligros desconocidos
a lugares incógnitos, insólitos,
donde rondan el ladrón y el travesti
hermanados por las sombras.
Nuestras calles
para rondarlas
a las cuatro de la mañana
con sabor a vino
y luna de queso enorme mirándonos
con faroles de vete a tu casa que ya es tarde
con rumor del río
viento fresco y cantos de pájaros
las cuatro de la mañana
aquí contigo abrazados
esperando un taxi.
Adiós amor.
Las mismas calles
ahora sin ti
sola a las nueve de la noche
esperando un taxi
para ir a casa
sola, sola.
Estas tus calles.
Esas mis calles.
Ningunas calles.
Ana María Gómez
Estas mis calles.
Algunas calles.
Calles para caminarlas
trasegarlas, seguirlas
encontrarlas, desviarse.
Calles para pararse
atravesarlas, aceptarlas
sufrirlas, soportarlas
disfrutarlas, recorrerlas.
Las calles de día
llenas de autos
de pitos, de ruido, de ventas,
de gentes que caminan sin ver, ensimismadas.
Las calles con lluvia
cantarinas, evocadoras
con barquitos
y marinos de ilusión en los charcos;
con huecos, con fango, resbalosas.
Las calles de noche
silenciosas, tranquilas, serenas.
Otras polvorientas
con basura, con papeles
y trozos irreconocibles.
Algunas calles de noche
incitantes, provocadoras,
pecaminosas
que llevan a peligros desconocidos
a lugares incógnitos, insólitos,
donde rondan el ladrón y el travesti
hermanados por las sombras.
Nuestras calles
para rondarlas
a las cuatro de la mañana
con sabor a vino
y luna de queso enorme mirándonos
con faroles de vete a tu casa que ya es tarde
con rumor del río
viento fresco y cantos de pájaros
las cuatro de la mañana
aquí contigo abrazados
esperando un taxi.
Adiós amor.
Las mismas calles
ahora sin ti
sola a las nueve de la noche
esperando un taxi
para ir a casa
sola, sola.
Estas tus calles.
Esas mis calles.
Ningunas calles.
Ana María Gómez
Por fin figuramos en
ResponderEliminarwww.territoriosciertos.org
la página del 8 salón de octubre
Albricias
Penálipe - Ana María
Tu paseo por Cali , que tanto añoramos !! varias de mis partes favoritas están en todo el corredor Oeste que se pega a los cerros .. pásate por ejemplo por el vecindario del Santuario de Fátima en Sta Mónica Alta al lado d la Policlínica , esta es una parte poco publicitada de la ciudad que de hecho no parece Cali .. con calles super empinadas y tranquilas y la iglesia tiene una arquitectura bien intersante , creo años 50 estilo la de Brasilia cuyos detalles y vistas podrían caber en tu blog... ahi t dejo la inquietud ya que a tí te queda más facil darte una pasadita por allá que a mí.
ResponderEliminarAndrés
Ciudad de México
Hola no encuentro tu video...
ResponderEliminarMe imagino que se referirá a la entrevista a Lebo Mashile este es el enlace:
ResponderEliminarhttp://territoriosciertosanamariagomez.blogspot.com/2011/07/lebo-mashile-una-poeta-que-piensa-y-lo.html
Gracias por el interés,
Ana María
Y si se refería a el video de este poema Las calles, no tengo videos de todos mis poemas...
ResponderEliminarsolo de algunos que leí en público y alguien lo hizo y me avisó después...
Ana María
Están muy bellas las calles y el espacio de la Colina, Ana María.
ResponderEliminarUn beso y un abrazo...
Rodrigo
Ya quiero caminar por tus calles Cali
ResponderEliminarya quiero bañarme en tu río Pance
ya quiero disfrutar de tu brisa en las tardes
ya quiero soñar
ya quiero vivir
ya quiero cantaaaaar
La soñadora, caleña